Como se ha visto, el propósito en el Matrimonio está basado en principios que deben desarrollarse por parte de ambos conyugues para estar unidos en amor, cumpliendo su pacto matrimonial que se basa en sus propios votos a fin de fortalecerse de tal manera como esposos que puedan darse Honra; para que todo esto ocurra la única manera de provocar esa fusión entre ambos es permitiendo que Dios amolde los corazones y para que eso ocurra el único medio es la Oración.
Sin embargo, en una gran medida no sabemos como elevar nuestras oraciones para que puedan ser escuchadas y respondidas por Dios. El elemento principal de cada oración debe ser LA FE, puesto sin Fe son peticiones vacías. La pregunta es ¿de que tengo fe?, más que resolver las situaciones actuales debe ser puesta la mirada en lo que Dios ha puesto en nuestras manos, hablando de matrimonio específicamente.
Genesis 2,21-23 Dios saca de la costilla del hombre para crear a la mujer, esto es sus propios huesos, es decir su propia identidad formándola como una la estructura solida es compartida por dos, es su identidad y complemento. No obstante, cuando las cosas no van bien en el matrimonio la Palabra nos lleva a Apocalipsis 3,1-2 donde debemos mantener conciencia espiritual para Afirmar las cosas Perdidas, si en el matrimonio se están desviando por las situaciones actuales que pasan, debemos afirmar el amor, el respeto, la visión de estar juntos, la solidez de varón y hembra como complemento y la seguridad que Dios tiene lo mejor para sus hijos en lugar de poner en nuestro corazón el vacío que es engaño, esto esta al alcance de nuestra boca a través de los frutos de los labios que es la Oración.
Debemos estar prestos con ojos espirituales atentos para saber interceder por mi conyugue y nuestra relación, reconocer los caminos de Dios mas que los nuestros Isaías 55,8-12; mantener la mirada en una constante y firme voluntad de Perdón para poder reconciliarnos en caso de existir diferencias, Mateo 5,23 y poder estar habilitados para pedir lo que necesitemos Juan 15,7; sin dudar Mateo 21,22. Sobre todo, estar de acuerdo ambos para alcanzar nuestro Pacto ante Dios, Mateo 18,19-20.
Solo comprendiendo que debemos estar UNANIMES en oración, podemos alcanzar lo que Dios tiene para nuestra vida matrimonial, recordando que lo que sembramos será lo que cosecharemos.
Padre, hoy pedimos por todos aquellos matrimonios que necesitan de tu buen consejo, de tu compañía, de tu provisión y sobre todo de tu amor, para que estando unidos en común acuerdo sepan encontrar el camino que has destinado para ellos como esposos, que sus corazones crezca el perdón de nuestro Señor para que estén unidos en todo momento y puedan cumplir sus promesas como debemos cumplirlas tal como tu nos enseñas al cumplir tus promesas por tu fidelidad. AMEN.